La Comisión de Crisis es un comité dinámico e impredecible donde los delegados deben responder de manera inmediata a situaciones actuales o hipotéticas propuestas por los presidentes. A diferencia de otros comités, aquí no se entregan temas previos: las crisis se revelan el mismo día del modelo, lo que exige pensamiento estratégico, reacción rápida, creatividad y capacidad de trabajar bajo presión.

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Aunque no pertenece a la estructura real de la ONU, este comité funciona como un espacio especializado dentro del Modelo ONU para desarrollar habilidades de toma de decisiones en escenarios de alta tensión. Los delegados deben adaptarse, negociar y diseñar respuestas efectivas en tiempo real, fortaleciendo así su liderazgo, análisis crítico y manejo de situaciones complejas.