La Cumbre de Líderes Mundiales es un comité diseñado para explorar grandes dilemas globales desde una perspectiva humanista, ética y casi filosófica. Aquí, los delegados abordan temas amplios y profundos (sobre gobernanza, sociedad, tecnología, humanidad, poder, entre otros) que exigen análisis crítico, visión global y argumentación sólida. Es un espacio donde se debate no solo qué debe hacerse, sino por qué y con qué principios.

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Aunque no pertenece a la estructura real de la ONU, este comité funciona como un escenario especial dentro del Modelo ONU. En él, los delegados representan líderes mundiales del pasado o del presente, lo que permite contrastar visiones históricas, ideológicas y culturales para enriquecer el debate. Es un foro único que combina pensamiento político, reflexión ética y perspectivas de liderazgo para comprender los desafíos que moldean el mundo.